Biopsias de Piel
Es el procedimiento ambulatorio diagnóstico, y a veces terapéutico, esencial y más frecuente en una enfermedad dermatológica, fácil de realizar, rápido y con virtualmente ninguna molestia o limitante. No es sinónimo de enfermedad maligna.
Se realiza en el consultorio. Consiste en la extracción de un pequeño fragmento de piel, precedido de la aplicación de anestesia local. Hay diferentes formas de obtener la muestra ya sea mediante afeitado, con un sacabocado de entre 3-6 mm de diámetro o incisional. Esta última, generalmente, para realizar la extirpación completa de una lesión.
La biopsia de piel nos proporciona los datos necesarios para obtener el diagnóstico certero de una enfermedad, en ocasiones para descartar una serie de posibilidades diagnosticas adicionales que pueden parecerse entre sí y en otras ocasiones para indicarnos los márgenes libres y la profundidad de las lesiones extirpadas.